La crisis global del agua

El 16 de Septiembre del 2011, expertos en agua se reunirán en Nueva York para una conferencia en las Naciones Unidas titulada el "Foro Internacional de Agua", el enfoque del cuál será el alarmante problema global del agua.

El estado de animo en la ONU será sombrío. La situación con el suministro de agua y saneamiento alrededor del mundo tan solo puede ser descrita como abismal. Actualmente, 1.5 millones de niños menores de 5 años mueren cada año de enfermedades relacionadas con el agua que podrían ser prevenidas (4,000 cada día), alrededor de 900 millones de personas (1 de cada 6) no tienen acceso a agua potable segura, y 2.6 miles de millones (2 de cada 6) no tienen saneamiento. En el mundo en desarrollo, 90% del agua de desecho se vierte sin ser tratada a los cuerpos de agua, esparciendo contaminación y enfermedades y generando "zonas muertas". El Banco Mundial reporta que 80 países están sufriendo escasez de agua. Uno tiene que preguntarse si los horrores que ocurren en el cuerno de África son un precursor de lo que vendrá en otras partes del planeta.

Ésta ya desesperante situación tan solo empeorará con el cambio climático y el crecimiento de la población. El cambio climático probablemente acelerará la desertificación (de tal forma reduciendo la tierra cultivable en ciertas áreas), alterará los patrones de lluvia, generará eventos meteorológicos extremos, y producirá ciclos de sequías más largos y duros. La ONU estima que la población del mundo crecerá en 3 mil millones de personas más para el 2050. Por tanto, el crecimiento de la población y el cambio climático están en ruta a una colisión catastrófica. Qué tanta agua pueda encontrarse para soportar este número de personas es, junto con enfrentar el cambio climático en sí mismo, el tema más fundamental que enfrenta la humanidad. Adicionalmente, la insuficiencia de agua supone un tema de seguridad nacional para los Estados Unidos. Alrededor del mundo, 215 ríos principales y 300 acuíferos subterráneos son compartidos por dos o más países. La creciente escasez llevará a conflictos en los cuáles se verá arrastrado EE.UU. Las reclamaciones por el agua en el Medio Este, y la escalante tensión entre India y Paquistan por las divisiones del agua, son particularmente preocupantes.