Cubre smog a León

Dr. Doom Jue Dic 18, 2008 10:12 am

¡Bieeeen, leoneses! ¡A seguir contaminando lo más posible! ¡Quien quita y al rato le ganamos a la ciudad de México! ¡Si se puede, si se puede!

León vivió ayer el peor día del año en contaminación.
La situación más crítica ocurrió en la zona sur de la ciudad, pues durante todo el día se tuvieron niveles de bióxido de azufre (SO2) por encima de los que se registran en Salamanca.
A las 2 de la mañana, la concentración de bióxido de azufre fue cuatro veces superior al promedio registrado en la zona de la refinería salmantina, según datos de la estación de monitoreo ubicada en la clínica T-21 del IMSS, en el barrio de San Miguel. A pesar de que en esa zona se vivió una situación peor que la de Salamanca (en donde ayer se declaró precontingencia ambiental), las autoridades de Ecología no alertaron a la población leonesa sobre los riesgos a la salud.

El SO2 no fue el único contaminante que se disparó en esa zona. Entre 9 y 11 de la mañana la concentración de Partículas Menores a 10 micras (PM10) fue superior a la que se tuvo en Salamanca.

La estación de monitoreo ubicada en la Facultad de Medicina, reportó que en la zona del Barrio Arriba y de La Garita la contaminación se disparó a su peor nivel a las 10 de la mañana.
En la estación instalada en la Cámara de Calzado se registró una acumulación de contaminantes dos veces superior al de Salamanca a la una de la madrugada y a las 11 de la mañana.

A esa hora la concentración de PM10 en la zona oriente de León fue de 361 microgramos por metro cúbico, y la norma oficial indica que no se deben respirar niveles superiores a los 120 microgramos porque representan un riesgo a la salud.

En la zona norte también se registraron altísimos niveles de contaminantes. El cerro Gordo y el Cerro de El Gigante desaparecieron en medio de una espesa nube de smog.
“Estamos en una situación de alerta en la que tenemos que tomar medidas para disminuir los efectos negativos en el ambiente, vamos a hacer operativos más severos con ladrilleros, con los que queman baldíos y a detectar a los que no cumplan con las verificaciones”, advirtió José López Araiza Alday, director de Protección al Ambiente del Municipio.

Dijo que lo que ayer se vivió fue el fenómeno de la inversión térmica.
La escasa circulación de aire y el frío provoca que se estacionen un cúmulo de partículas de contaminantes, explicó el funcionario. “Es una inversión térmica muy fuerte que ocasiona que los gases contaminantes se queden estancados en la ciudad, sobre todo en la mañana y en la noche que es cuando está más baja la temperatura”.

Fernando Porras, delegado de la Procuraduría de Protección al Ambiente (Profepa), aseguró que León tiene peor contaminación ambiental que Salamanca.
Mencionó que en lo que va del año se han registrado en León 19 días fuera de la norma ambiental, mientras que en Salamanca van 9.

“Hay más problemas ambientales en León que en Salamanca. Si checamos el inventario León tiene más
emisiones de contaminantes en la atmósfera que en cualquier otro municipio del estado”.
Explicó que en 19 días se superó el límite máximo tolerado del contaminante PM10, que son partículas que penetran a los pulmones y afectan el sistema respiratorio de manera grave.
“En León se están dando inversiones térmicas”, confirmó el funcionario.

En altas concentraciones el Dióxido de Azufre (SO2) puede ocasionar dificultad para respirar, humedad excesiva en las mucosas, irritación severa en vías respiratorias e incluso al interior de los pulmones por formación de partículas de ácido sulfúrico.

El SO2 puede llegar a causar broncoespasmos en personas sensibles como los asmáticos, agravamiento de enfermedades respiratorias y cardiovasculares.

La combinación de óxidos de azufre y partículas suspendidas producen un efecto combinado mucho más nocivo.
Las partículas menores a 10 micras no son retenidas en las vías respiratorias superiores y pueden penetrar a los pulmones.

Provocan irritación de las vías respiratorias, agravan el asma y favorecen las enfermedades cardiovasculares.
En el corto plazo la contaminación por PM10 puede causar el deterioro de la función respiratoria.
En el largo plazo se asocia con el desarrollo de enfermedades crónicas, con el cáncer o con la muerte prematura.

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